miércoles, 26 de mayo de 2010

Nuevas aclaraciones

Ya que algunos se sienten muy expuestos debo aclarar una cosa. En los casos en los que se lee “Zinni” se está haciendo referencia a una persona ficticia.
No existe esa persona en la realidad.

sábado, 15 de mayo de 2010

La cometa

Habíamos salido con Zinni de Gesell a la mañana y fuimos a chupar birra con Adrián y su gente a San Bernardo. Allá por el 2003 veranear era muy barato, así que habrán pasado unas cuantas frescas acompañadas con un cacho de vacío que sobraba de la noche anterior.
Ya era de noche y nos encontramos con el Negro y Eche con los cuales surgió la idea de ir al casino de Mar de Ajó. Nos fuimos hasta allá a pata, obvio. El Negro y yo, bien austeros, para no decir “ratas”, salimos en cero. Zinni arriba con unos cuantos pesos y a Eche lo tuvimos que sacar a la fuerza en números rojos.
Como no había lugar para dormir, a la mañana volvimos hacia Gesell. Bajamos en la terminal y nos encontramos de casualidad con Gastón y Geri. Charla va, charla viene, nos quedamos dormidos en la calle.
De la nada alguien me patea las piernas. Abro los ojos, puteando, pensando que era algún conocido, pero no. Hombre pelado, de patrulla y con macana en mano:
-Flaco, despertá a tus amigos.
-Muchachos, arriba que llegó la cana. –Obviamente no me creían, hasta que abrieron sus ojos.
-Siéntense contra la pared y pongas las manos atrás.
Seguían cayendo uniformados al lugar ante la mirada de todo el vecindario gesellino. Comienza la requisa, y para variar, el Negro dio la nota.
-Flaco, vos me vas a tener que acompañar. –En ese momento pensé “bueno, al menos yo quedé afuera”. ¿Para qué? Zinni, pronunció unas palabras pensando que lo iba a salvar de su ingreso a la comisaría:
-No, de ninguna manera. Si va él, vamos todo.
A lo que el oficial contestó:
-Bueno, suban todos a la camioneta.

Ingresamos dejando cordones y pertenencias, mientas nos comíamos una clase de moral del comisario.
-Muchaaaachos, yo tengo hijos de su edad.
Unas cinco horas más tarde, previo paso por el nosocomio zonal y una remontada de cometa recuperamos la libertad. Una vez más: gracias Negrito por ponerle pimienta a las vacaciones.

sábado, 1 de mayo de 2010

El día más lindo del año

Es así, se empieza a vivir desde la semana anterior. Algunos con miedo, otros con alegría. Es una mezcla de sensaciones. No importa la posición en la tabla, o si jugás bien, o si los once que visten la casaca blanca son horribles.
La gente está igual metiendo la fiesta en la calle y en la tribuna. No importa la violencia, no importa que la policía te tenga que acompañar, no importa nada… la banda siempre está y no se puede explicar el por qué.



¡Ponele música, Huracán!



En las buenas... también estaremos.